03 abril 2011

Autumn Tales #1

Caminaba cansado y un poco exhausto supongo que era las consecuencias de la agitada noche anterior. Una botella de agua en la mano y unas gafas eran mis muletas para resistir el cansancio y la calurosa tarde. Me encontraba a cuadras de mi casa cuando la ví. Aquella chica parecía vivir cerca de mi calle, pero nunca la había visto antes. Aquella chica vestía unos jeans oscuros, zapatillas negras y un polar que le quedaba un poco ancho y largo de mangas, ella iba unos pasos adelante mío y yo pensaba "wow, por favor que se devuelta necesito verle el rostro aunque sea una vez" en ese instante aun no se porque la chica voltio un poco la cabeza y pude ver su rostro. Llegando a mi calle la chica siguió caminando, yo me detuve en la esquina para ver casi psicopatamente donde ella vivía.

Miraba el techo de mi pieza los móviles se movían en todas direcciones gracias al viento que entraba desde la ventana. En la tele Jack White me hacia rockear con Hardest Button To Button y los ojos del Pequeño Alex me miraban desde el poster de A Clockwork Orange que tenia en mi pared. No se si fueron los ojos de Alex o quizás la voz de Jack, pero sentía que a la chica de hace un rato tenia que verla de nuevo.

Me pare de mi cama, salí de la casa, con la frente en alto y con mas seguridad que nunca fui a su casa, al momento de tocar el timbre mis piernas se quedaron paralizadas y mis manos temblaron, para poder moverme tuve que golpearme la rodilla y de ahí salí corriendo, sin aliento me senté en la esquina y espere. Mire las nubes y después de un rato me largue a mi casa.

Las semanas siguientes ella no apareció mas en vida, pero no podía dejar de pensar en ella. Mi mente divagaba escuchando mi disco de los White Tripe, mientras caminaba en dirección a mi casa luego de haber estado prácticamente todo el día en la Universidad. En ese momento mi vista se aparta del cielo y vuelve a la tierra una chica tirada recogiendo sus libros y yo corriendo a ayudarla. Recuerdo que la chica portaba un libro de Medicina y uno de Julio Verme, en ese momento prensé "Que rara la combinación, pero esta col"

-Gracias, no era necesario

-Da igual, no importa

Ella salió corriendo con la torre de libros en sus manos y para mi sorpresa era aquella chica que había visto las semanas pasadas. Cuando reaccione la chica no estaba, yo estaba en mi cuarto mirando el techo como siempre. No se por que me preguntaba si fuera demasiado demente ir a donde la chica y hablarle, ganas tenias, curiosidad tenia, pero no tenia valentía. ¿Mis ganas serian mayor que mi cobardía para poder hacerlo?

Era raro, ya estaba al frente de su casa, pero esta vez los golpes en las rodillas no servían para escapar, cuando pensé que no había nadie el rechinar de la puerta me corto la circulación por un segundo y lo único que pude hacer fue esperar.

-¿Si? -dijo la chica desde la puerta, mientras me miraba con cara de "Who-the-fuck"

-ehhh -titubee- Soy el chico que te ayudó hace un rato

-Si...

.........

-Y recordé que no te pregunte tu nombre

-ehh Emilia -dijo ella con un tono de duda.

Después de eso corrí, pero su voz me interrumpió -Tu tampoco me dijiste el tuyo- Grito Emilia.

Sebastián - Dije un poco sonriente-.

La chica tenía un polerón que decía Chicago y un pelo largo, ojos cafés pardos y una expresión de wath-the-fuck permanente en su rostro, aunque esta parecía agradable.

Las palabras que quería no salieron nunca. Ella volvió a entrar, pero salió de inmediato tomo un gorro abrió el portón

-¿Vamos a salir o no?

-...

-Un chico no viene a la casa de una chica solo para preguntarle el nombre, menos si el chico esta temblando de nervios como tu ahora

-Y adonde quieres ir

-Solo salgamos, caminemos y no pensemos, a menos que me aburra.

No hubo palabras casi por media hora, por dentro ya veía venir que Emilia se largaba...

-Encuentro raro esto

-No sé no soy muy bueno en esto

-No me refiero a eso

-Me refiero a la gente

-¿Como?

-Es que encuentro tonto de que no crean que una persona sea feliz sola

-Me da un poco lo mismo

-Por eso ¿Tú disfrutas el estar solo?

-Ósea si, es rico poder estar solo tu y tu sombra, cuestionarte, analizarte y darte cuenta de tus errores

-Yo pienso que la compañía es una droga, ósea la pruebas poco a poco hasta que la necesites y si no la tienes te desvaneces en busca de algo que la sustituya

-Eso mismo es lo que pienso del amor, para mi el amor es una droga una vez probado tu cuerpo y tu mente te harán creer que sin amor no vives y necesitaras de el a como de lugar

-Si también puede ser - ella ríe - hace frio, regresemos

-Este bien

Habíamos regresado mis manos estaban frías y las calentaba envolviéndolas con los puños de mi polerón. Entre Emilia y yo no paso nada, solo fue agradable

-Me gusto el paseo

-.....

-Gracias por ser la droga, ojala podamos resistir y no convertirnos en adictos

-....

Un beso en mi mejilla sello el trato y una sonrisa en su rostro fue la firma de aquello. Ahora solo pensaba en ella, ojala que esta droga no me consuma hasta que mis huesos sangren y sean molidos- pensé.

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